Historias de toda una vida

Cartas que agrada recibir

viernes, 22 de agosto de 2014

01 SENTADO BAJO UN GALLARDO CEDRO



SENTADO BAJO UN GALLARDO CEDRO
Valladolid, 14 de Junio de 2007
Estimado amigo José Luis:  En la tarde de ayer  la temperatura ambiente era tan agradable que invitaba a pasear, y  dónde mejor que por el Campo Grande, sonrisa pucelana, pulmón de Valladolid , alegre y concurrido parque, jardín romántico lleno de rincones poéticos...Me produce placentera satisfacción deambular por los sombreados paseos entre mis amigos los árboles cuyo nombre de todos ellos conozco: abedules, abetos, acacias, álamos, arces, aligustres,  aladiernos, encinas, enebros, fresnos, fosticias, evónimo, ginkgo,  liquidanbar, macluras, moreras, olmos, palmeras, robineas, robles, pinsapos, sabinas, secueyas, tejos, tilos, tuyas, viburnos, etc., etc., etc.
        
         Sentado bajo un gallardo cedro, sintiéndome estrechamente vinculado a la naturaleza, va atardeciendo, los últimos resplandores solares largos y oblicuos dan a las cosas nueva y misteriosa dimensión; así, gozando en plenitud de la realidad circundante, dejándome penetrar por los dorados rayos del sol, embriagándome de su luz, recuerdo tu invitación a seguir con los correos, que acepto, y qué decir a alguien cuyos lazos amistosos van echando raíces, sino, precisamente de amistad. Tener amigos es estupendo, es por ello que la amistad siempre es valorada  como uno de los más nobles sentimientos. Los amigos nos ayudan a vivir, gracias a ellos nos conocemos mejor a nosotros mismos y entendemos mejor el mundo. La sentencia popular dice, “cada uno muestra lo que es en los amigos que tiene”  Las amistades nos cargan las pilas vitales con energía positiva y  nos curan del mal de los abueletes, la soledad con las divertidas y disputadas partidas de mus. A propósito, ¿recuerdas tu deuda?  Liquídala si no quieres tener en la puerta de casa al tío de frac.  
         Pues eso, amigo José Luis, que te deseo lo óptimo.
                                               Un abrazo

02 ¿CUÁNTAS HORAS TIENE MI VIDA?



¿CUÁNTAS HORAS TIENE MI VIDA?
Valladolid 4 Septiembre de 2001
Queridos hijos: ¿Cuántas horas tendrá mi vida? Veamos, llevo vividas: 365 x 24 = 8.760 x 80 = 700.000, casi nada. ¿Cuántas me faltan aún por vivir?
Las que sean no me apetece en absoluto vivirlas al tuntún, sin otra ocupación que la inactividad, porque ese sólo matar el tiempo propio de los viejos es una tontería como un queso puesto que un día más es un día menos, el de hoy ya pasó, ¿mereció la pena? Daré un repaso a los cabos atados: me tiré de la cama a las 5 de la mañana, mi hora habitual de hacerlo, porque el catre y yo, si no es dormido, ni yo para él ni él para mí. Dediqué largo rato a leer a José Pla, un escritor que me emociona, seguidamente escribí y pasé al ordenador esta carta, posteriormente bajé a la compra y preparé la comida. La cocina me proporcionas satisfacciones, entre ella el afán de hacer las cosas bien para alegrar paladares. Luego dediqué un par de horas a los amigos jugando al billar y al mus. A renglón seguido de la comida la siesta, que me gusta más que a un tonto una tiza.
La tarde la dedica más bien al dulce ocio, el quehacer de no hacer nada, a no ser pasear y pensar. Hoy, por ejemplo, he dado en cavilar que a mi edad y tal como están las cosas, lo que me conviene es no echar mucho los ojos para atrás ni para adelante, aferrarme al momento presente y disfrutarlo con todas las consecuencias.
En conclusión: tal vez por este mi modo de huir de no hacer nada, de vivir relativamente activo gozo de buena salud, salvo la raspa dorsal; el corazón me funciona como un reloj suizo, los riñones se mantienen en buen estado; la red de casquerías, el hígado, sano como una manzana y el estómago, mejor imposible, todo, claro, considerando que soy un octogenario, lo que no es ninguna tontería.
En tocante a lo mental también trato de mantener en movimiento el engranaje para evitar en lo posible me falle la cabeza, es decir, las neuronas, esas células que componen el cerebro, porque ya se sabe lo que sucede cuando dejan de funcionar, que la memoria se te diluye, la imaginación se seca y el cerebro se niega  a seguir pensando con claridad y entonces los recuerdos no tienen opción, ni la vida sentido y se vuelve neutra, sin razón, sin pasado, ni presente, ni futuro, ya no será ni rosa, ni azul, ni triste, ni alegre, ni presente siquiera.
Ese quedarse hecho una estatua sin funciones cerebrales, precisamente porque el cerebro se va sabe Dios donde para quedarse sin voluntad para decidir sobre el cuerpo ni sobre la inteligencia es lo que nos amedranta no poco cuando nos hacemos viejos.
Hijos, que en vuestros corazones reine la sencilla alegría de la paz y del amor.

Besos y abrazos

03 CRISTINA QUERIDA NIETA



CRISTINA QUERIDA NIETA



Valladolid, 3 de septiembre de 2009.


Cristina, querida nieta cumpleañera: Por ser tu día, y además por que
sí, te deseo con todas la fuerza de mi corazón que seas feliz, feliz con una felicidad de lo mejor, ligera y sencilla, mucha alegría y mucho amor, un amor que coloque a tu lado la maravilla de una  buena compañía para el camino de tu vida.

Fueron, querida Cris, buenos tiempos aquellos de vuestra niñez en los que se me lleno la memoria de imborrables recuerdos, por ejemplo, cuando confiando plenamente en mí te dormías caminando, cogidita de mi mano.

Pensemos, Cristina de mi corazón, que el mundo es un lugar agradable para vivir si tomamos las cosas con filosofía, humor y, por supuesto, por el lado más positivo y generoso, procurando sacar el máximo provecho de las vibraciones positivas y evitando enfados y problemas, que sean nuestras reacciones explosiones de cariño y simpatía a favor de los demás.

Cristina, peluquera estrella, vamos a ver, ¿quieres ser verdaderamente feliz y estar sana y contenta? Lo tienes fácil: ríe, canta, baila, y sin hacer daño a nadie da alegría al cuerpo y buenas cosas, que para eso está hecho. Ah, y que ni ahora ni nunca te falle el sentido del humor, que es la chispa que llena el mundo risas y alegría.

                  

Cariñosos besos y abrazos de tu abuelo,

04 ADORADA MARÍA



ADORADA MARÍA
Valladolid, 5 de Septiembre del 2001

Adorada MARÍA: morenita preciosura de asombrosos ojos de un profundo y violento negror, niña soberanamente lista, y por añadidura con notable disposición para la música, pues pese a lo chiquirrina ya tocas como los propios ángeles cancioncillas que emocionan.
Bueno, en vista de ello, tu abuelo que te quiere como a la niña de sus ojos y desea que seas feliz como una rosa visitada por una mariposa "arco iris", como una estrella recién nacida, por ser día de tu santo y cumplir siete maravillosos añitos, voy a contar para ti sola, o sea, en exclusiva y con el propósito de que se llene tu espíritu  y tu imaginación de admiración y asombro el modo y la manera que actuó Dios a la hora de crear el Universo.
Bueno, mira, María, paseaba el Supremo Hacedor con magnificencia, a la vez que con grandiosa llaneza y campechanía por el Paraíso, fabuloso jardín botánico del Cielo, cuando de pronto se vió rodeado de una nube de angelitos, querubines, serafines...  que apenas le permitían dar un paso, asediado con un alborotado ruego:
-Divina Majestad, por favor, haz un milagro, obra un prodigio, un prodigio, por fa.
Asomó a la cara del Señor una deslumbrante sonrisa  y soberanamente afable y regocijado, con voz  divina dijo complaciente:
-Bueno, bueno, pequeños, paz en el Paraíso.
Y poniendo en juego su suprema inteligencia creó primero un punto que era y no era nada, y dijo:
-Muy bien, chiquirritines, mirad allí, ¿véis allá en lo más remoto de la misteriosa y más absoluta oscuridad una como canica  sin apenas superficie, hecha de nada, situada  en ninguna parte acelerándose en caída libre sobre un imaginario plano inclinado? Pues ¡atención! qué ahora viene lo bueno.
Y que la canica estalla, dando lugar a unos juegos de artificio jamás imaginados. ¿Recuerdas, María, la noche de San Juán  el la playa de Melilla la riada  de serpentinas luminosas que de pronto salpicaban el cielo de resplandores, a la vez que el estrépito de los petardos atronaban el ambiente? Pues igual, pero a lo grande, a lo portentoso, a lo sublime.

Por la natural expectación que despertó presenciar en primera línea aquella portentosidad, nada más y nada menos que el principio del principio de las cosas, hasta el tiempo inició su marcha, se organizó un buen tumulto a las puertas del Edén, un ligero conato de alboroto con algunos grititos  y empujoncitos de alas, plenamente justificado, puesto que para entonces ya se apretujaban estrechamente en torna al Todopoderoso la Corte Celestial en pleno. Allí estaban los arcángeles, seres angélicos de primer orden; ángeles, querubines, serafines, o sea, los nueve coros de espíritus celestes: potestades, principados, dominaciones, virtudes..., es decir, el Olimpo  al completo.
En Plena explosión de gloria y frenesí las bocas de todos los bienaventurados hechas "O" por la sorpresa, lanzando series interminables de ¿oooohss¡ y ¡aaaahss¡ de admiración y asombro, a más de exclamaciones entusiásticas  ¡Formidable¡ ¡Colosal¡ ¡Enorme¡ ¡Enormísimo¡
Efectivamente, ante los ojos pasmados de todos los moradores del reino celestial  la gran espaciosidad infinitamente vacía se iba llenando vertiginosamente, explendorosamente de constelaciones de todos los tamaños, nebulosas de todas las formas, nubecillas celestes de todos los colores: galaxias, galaxias y más galaxias, galaxias en espiral, galaxias elípticas, esféricas, anulares, irregulares, difusas y confusas. Las Siete Cabrillas, Cola de Dragón, Boyero, Cinturón de Orión, Camino de Santiago, ese caudaloso río de estrellas que cruza el cielo de punta a punta; el cúmulo estelar de Hercúleas, Cabeza de Caballo, Cangrejo, Las osas, Las Tres Marías, El Carro de la Virgen,  El Zodíaco... Esto es estrellas, estrellaaas por miles de millones, estrellas a miríadas: gigantes, enanas, variables, estrellas con rabo, equivocadas, viejas, recién nacidas, fugaces, blancas, rojas, azulosas y amarillentas, novas y supernovas, libres, fijas, errantes y erráticas, gemelas, triples, múltiples, explosivas, temporeras, variables... y hasta esos misteriosos y formidables  agujeros negros tan prepotentes gravitatóriamente hablando que curvan con facilidad los rectilíneos rayos de luz que osan cruzar por el  vasto patio de su casa. Finalmente  pidió Jehová la atención de la celestial concurrencia para mostrar dos motitas de polvo,  una algo mayor que la otra: la Tierra y la Luna.
Así, de este modo tan natural y taumatúrgico ocurrieron las cosas, y ahora tú conoces de  pe a pa tal maravillosidad supongo que unirás tu voz a la de los ángeles, querubines y serafines... en los aplausos, oraciones y emocionados  ¡hurraaaas!  Y ¡Loado sea el gran Arquitecto del Universo!
La voz del abuelo así mismo se  suma a la vuestra, a la par que te besa y te abraza con el corazón inundado de cariño.

05 MARÍA QUINCEAÑERA



MARÍA QUINCEAÑERA
Valladolid 5 de Septiembre de 2009
María, mi adorada nieta quinceañera: Te deseo un día tan magnífico que la dicha se te cuele en el corazón de modo y manera que te haga sentir especialmente buena, bonita y singularmente feliz.

Imaginar no cuesta dinero ¡qué maravilla! Y cumples tus floridas primaveras, muy señalado día para echar a volar la imaginación y hacerme la ilusión de que te tengo a mi lado y contemplo tu preciosa carita morena llena de gracia, tus ojazos negros rebosante de alegría y en tus labios luciendo una sonrisas inteligente, franca, contagiosa, tu cuerpecito espigado…y disfruto de lo lindo con la quimérica idea que cumplo, como tú, quince años. ¡Idear utopías también es gratis!

María, se dice, y yo lo creo, que Dios está contento cuando nos ve felices, así que tú dale un gran alegrón mostrándote jubilosamente alegre y dichosa.

María de mi corazón, escucha y créeme: las personas que merecen la pena, esto es, las que poseen inteligencia racional y emocional son optimistas, comparten sus sentimientos con los demás, toleran las críticas y, para decirlo todo de una vez, como han venido al mundo para querer y ser queridos, cifran sus felicidad en hacer dichosos a los demás. Simplemente genial que tú seas una de ellas, ¿qué tal intentarlo?

Querida María, otra cosa  voy a desearte: una buena dosis de sentido del humor, porque el sentido del humor bien desarrollado saca de las cosas lo bueno y lo divertido, llenando un mundo de risas y alegría.

La vida, María, empieza todos los días, cada mañana, así que tírate de la cama animosa, alegre como un jilguero, bien dispuesta a la alegría, con el firme propósito de no entristecerte por nada ni enfadarte con nadie, siempre a punto de ser útil y necesaria a los demás.

Se inicia un nuevo curso, como conozco tu afán de superación, hala, a estudiar con ahínco, que saber es mágico, conocer las cosas por dentro, su funcionamiento. Según los cerebros privilegiados que saben por donde andan, dicen que el saber es el alimento del alma.

María, María, María, que tus ilusiones, imagino que en cascada, se te hagan realidad palpable y visible, entre tanto ahí te van cien abrazos y mil besos de tu abuelo, Félix.