Historias de toda una vida

Cartas que agrada recibir

domingo, 9 de marzo de 2014

EL DESPERTAR DE LA PRIMAVERA

EL DESPERTAR DE LA PRIMAVERA

MARZO 2002

Queridos hijos: Con ánimo optimista trepo por la cuesta del psiquiátrico contemplando un espectáculo que alegra los ojos: “el despertar de la primavera”; es decir, ver florecer el campo perfumando el aire fresco, oyendo el canto enamorado de los pájaros buscando novia. Pero aun busco más, tratar de desintoxicarme por dentro y por fuera aprovechando los días ya largos, la temperatura cálida y la mayor cantidad de rayos solares en cara y manos que te hacen sentir renovado, con mayor vitalidad y mejor humor.
O sea, lo dicho, el aumento de la luz y el calor de los rayos solares favorecen la actividad de la madre naturaleza y por supuesto a nosotros como parte de ella también.
Es decir, resulta ocasión ideal para realizar una limpieza de cuerpo y espíritu. Por ejemplo: Tratar en lo posible de desprendernos de lo inútil.
Los pensamientos negativos, las obsesiones y las preocupaciones desrazonadas trastocan la realidad, impidiendo disfrutar de las pequeñas-grandes cosas que nos rodean.
Se dice, con razón, que las ideas entristecedoras son pensamientos “virus” que arruinan la salud; contrariamente, el ánimo jovial es como encender un rayo de luz dentro de nosotros.
La ocasión también se presta para pensar en iniciar una dieta depurativa consumiendo alimentos que nos ayuden a ser más alegres, ligeros y vitales.
Hijos, pues eso, que tengáis siempre presente que la risa fácil y el corazón generoso alegran y alegran la vida.

Besos y abrazos

Félix