Historias de toda una vida

Cartas que agrada recibir

miércoles, 21 de diciembre de 2022

BIENVENIDO A LA VIDA DAVID

 BIENVENIDO A LA VIDA DAVID   11-12-2022

 Hola pequeño David. Ya llegaste, al fin pudimos contemplar tu preciosa carita. ¡¡Qué guapo!! Bueno, en realidad eso dice tu yaya Pili y no sé si creerlo, aunque mirando tus fotos, he de reconocer que sí, que tiene razón. Eres una preciosidad. Has nacido guapísimo y sanito, que es lo que en verdad importaba y tu mamita una vez más ha sido una campeona.

Papá, el grandullón que te cogió en sus fuertes brazos apenas saliste de la tripita de tu mami, es en estos momentos el hombre más feliz sobre la tierra y va a ayudar mucho a que tu mami se recupere pronto para poder disfrutar de ti muchísimo ¡¡Ya sois familia numerosa!!

Ahora de momento les verás nerviosos, pero no te preocupes, que pronto se les pasará. El trance no ha sido fácil, nunca lo es, y ahora además sin poder recibir la visita de las abuelas, a ellos se les hace un poco más cuesta arriba, aunque ya son unos expertos en cuidar preciosuras.

 No sabes qué suerte tienes pequeño. Has llegado a una familia que te esperaba con los brazos abiertos. Eres un niño buscado y deseado con mucho amor.

En casa te esperaban ya ansiosos tus hermanos mayores. Ya verás qué bien lo vas a pasar con todos los juegos y juguetes que te tienen preparados, aunque de momento es pronto, no puedes jugar tanto como ellos quisieran porque eres muy pequeño y aún tienes que crecer un poco más antes de comenzar a disfrutar de todo lo que te ha regalado la vida precioso bebé.

 No vamos a engañarnos, no son tiempos fáciles, pero papá y mamá te mostrarán el camino de lo bonito que es vivir a tu lado.

 Con esta carta de bienvenida a tu vida, quiero dar la enhorabuena a toda tu gran familia, especialmente a tu yaya Pili que para eso es mi cuata y por serlo, me da derecho a que seas mi sobrino nieto. No sabes lo orgullosa que me siento de tener como mía, la bonita familia que es la tuya.

 ¿Sabes David? Además de a todos ellos, tienes una estrella grandiosa que desde el cielo siempre iluminará tu  camino. Es el querido yayo Félix. Estoy segura que desde su atalaya en el cielo de Cornón, sigue guiando los pasos de todos los que le quisimos.

Desde allá arriba ha de estar orgullosísimo al ver la familia feliz que ha formado su nieto Javi (tu papi), junto a la preciosa Laura (tu mami) y tus hermanos Gonzalo y Saúl y ahora tú pequeñín.

Te hubiera encantado conocerlo (y él a ti ni te cuento). Era el mejor yayo Félix del mundo. Él enseñó todo lo que sabía a tu yaya Pili para que ella fuera la mejor yaya y ya verás lo bien que aprendió.

 Crece sanito David. Duerme mucho y come bien. Verás qué rápido pasa el tiempo y lo enorme que te harás para que tu yaya presuma de nieto como lo hace de tus hermanos y de tus primos Héctor y Álex.

Precioso David, bienvenido a la vida. Disfruta de ella y se tan feliz como todos te deseamos.

 
Te quiere tu tía abuela

Marisa

domingo, 6 de febrero de 2022

HUBIERAS CUMPLIDO 100 AÑOS

 


06-01-2022

HUBIERAS CUMPLIDO 100 AÑOS

 

100 Años ya, cuando comenzó tu historia,

Y el mundo alcanzó la gloria de tenerte para sí.

Hombre luchador, valiente, guapísimo, inteligente,

Al que conocí ya añoso y viejito te perdí.

 

De ti aprendí la mesura y el gusto por escribir.

Regar de escritos y sueños el camino de la vida.

Eso de “gritar no es bueno”, también lo prendí de ti.

A conocerte muy hondo al leerte lo aprendí.

Bendito momento cuate, el día que te conocí.

 

Siendo de dineros pobre, ricachona me decías.

No era de oro mi riqueza, ni hacienda en verdad tenía,

Muy rica me hiciste tú, confiándome tus cuitas.

Riqueza fue tu amistad y lo mucho que me querías.

Te admiré al leerte viejito, sentí orgullo y alegría

En cada carta encontré tus sentimientos, tu vida,

Sintiendo emoción inmensa al saber que era tu amiga.

 

Confiaste a mí esos tesoros, no sé si lo merecía,

Me confesabas tu sueño, con esa eterna sonrisa,

Feliz tomé tu recado, hice lo que me pedías:

Que publicara en las redes las mil cartas que escribías,

El sueño lo viví yo, cumplí lo que pretendías.

Cartas, leyendas de lucha, de guerras, de rebeldía,

Una vida cuya historia, el mundo se perdería.

 

Qué suerte tuve viejito pues que al leerte encontré

Una vida apasionante, en tesoros de papel.

“Las cartas del yayo Félix”, así tu Blog titulé,

Esas cartas cada día, una a una publiqué.

 

Así la leyenda supe,de Filomena y su hazaña,

Que ya a punto de parir, marchó a la fuente a por agua,

Y tú impaciente cornito, en aquella fuente mágica,

Anunciaste ¡¡que ya voy!! A tu mamita adorada.

 

Ella valiente mujer, a parir se fue a su casa,

No hallando allí comadrona, ni nadie que la ayudara.

Rezó a la virgen tu madre, por sentirse acompañada,

Te parió en suelo de tierra, no pudo alcanzar la cama,

Solita te trajo al mundo y te envolvió en una manta,

Cuando al fin llegó su esposo, solita te amamantaba.

Aquella tarde de Reyes, ella fue la única Maga.

Así comenzó tu vida, la que en tus cartas contabas.

Creció en ti un niño  travieso; comenzaron tus andanzas.

 

De una infancia en plena guerra, contabas tus correrías.

Un muchacho que emigró para encontrar nueva vida

Travesía de penurias, también dejabas escritas.

Qué hermosura fue leerte, ¡ay cuate vendito el día!

¡Qué bonito te ha quedado!  Con cariño me decías.

Tan sólo fui el instrumento, tú el autor, la melodía.

Y presumías de ser, tercer yayo de mis hijas.

Si el trabajo era complejo, viejito, lo merecías.

Sabiendo que tu ilusión, estabas viendo cumplida.

Y así lo hice hasta el final… hasta el final de tus días.

Recopilé manuscritos, que en mil sitios los tenías,

Y yo empeñada mi cuate, en buscar la cronología...

 

De una valiente muchacha te viniste a enamorar,

Por su descaro y arrojo no te tardó en conquistar,

Pronto llegaría el sí, quiero, el sí quiero ante el altar.

España estaba en posguerra y tuvisteis que emigrar,

Con tu esposa embarazada, te tuviste que embarcar,

Sin dinero y sin empleo, una travesía infernal.

 

El destino marcó el rumbo: México, en su capital.

Más tarde embarcaba Obdulia, con tu amor se iba a encontrar.

Allí parió al primer hijo, México ya era vuestro hogar.

Después cinco mexicanas, una es mi cuata Pilar.

 

Qué feliz estarás cuate, en tu aposento final.

Ahí donde empezó tu vida ahora descansas en paz.

Qué bonita y dura historia, qué valiente tu mamá,

Que en el frío 6 de enero te pariera en soledad.

Hoy que 100 años pasaron, se cumplió tu voluntad

Volviste a Cornón mi cuate, y en Cornón descansarás.

 

Ya reposan tus cenizas, en ese lugar sagrado,

Donde tu valiente madre sintió dolores de parto.

Ya descansa tu universo en esa fuente, a su lado,

Donde comenzó la historia de tu vida, tu legado,

Tus cenizas con las de ella fundidas en fuerte abrazo.

Están Filomena y Félix, eternamente soñando.

Valiente madre y su hijo, 100 años pasaron raudos.

100 Años querido cuate, dos estrellas, Cornón están alumbrando.