Historias de toda una vida

Cartas que agrada recibir

martes, 9 de diciembre de 2014

QUERIDÍSIMO HÉCTOR




QUERIDÍSIMO HÉCTOR     11 de diciembre de 2011 07:51

Queridísimo Héctor, niño con nombre de héroe troyano:

Gran sorpresa nos tenías reservada precipitándote a fusionar la ilusión de tu llegada con la realidad, pues ya estás aquí, adelantado y no por la vía natural, pero felizmente has llegado. Bienvenido eres rodeado del cariñoso entusiasmo de todos, el mío al máximo, porque singularmente fascinado, inefablemente emocionado veo cumplida mi anhelada ilusión de alcanzar el muy noble y honroso título de bisabuelo.

Afortunados y venturosos padres ¡¡¡Muchísimas felicidades!!! El proyecto de tener un hijo se ha hecho realidad visible y palpable, ahora a disfrutar con enorme alegría la maravillosa compañía de ese querubín sano y feliz.

Oye, chiquirritín, encantados de que estés aquí y que seas como eres, aún más guapo visto en directo y en primer plano que en fabulosas imágenes de las ecografías, un palpitante trocito de vida, un angelito, un crío prodigioso que contemplándolo un manantial de ternura te brota dentro, por lo que resulta muy explicable que los ojos iluminados de abuelos, tíos y amigos no se cansen de mirar y remirar admirados y emocionados.

Chavalín, recién llegado, lógicamente, aún no te has enterado de que hay crisis, por lo que no llegarás con un pan debajo del brazo como antañamente, pero traes algo más valioso: cariño, ilusiones y alegría para derramar en tu entorno.

Héctor, chamaquito, mira, verás, por mis limitaciones físicas, celebramos casi a la par tu aterrizaje en el planeta Azul y mis noventa Floridas primaveras, por lo que no me va a ser posible ser tan bisabuelo como lo fui abuelo, cuando con tu mamá y tus tíos lo pasábamos en grande.

         Querido biznieto y felices papás, mil y un besos y abrazos plagados de deseos de salud, amor y felicidad del abuelo y bisabuelo

                                       Félix