Historias de toda una vida

Cartas que agrada recibir

sábado, 8 de marzo de 2014

SER ABUELO NO TE HACE VIEJO



SER ABUELO NO TE HACE VIEJO

Valladolid

Queridos hijos: Conozco sesentones que no les va ser abuelos, por algún conflicto interno les resulta difícil asumir el noble papel. Parece ser que experimentan cierta sensación de decadencia, o sea, que ingresan en la tercera edad.
Siento por ellos, no saben lo que se pierden, porque la experiencia de convertirse en abuelo, esa nueva etapa de un momento vital, la oportunidad de disfrutar de los hijos de los hijos, y recordar los buenos tiempos de la niñez  y el renacimiento de ilusiones ya dormidas.
Personalmente he de decir que me ha resultado plenamente satisfactorio. La estrecha relación con ellos me brindó la oportunidad de disfrutar sin fin de vivencias enriquecedoras: incontables momentos tiernos y emocionantes en que cómodos y confiados se quedaban dormidos en tus brazos, estar a su lado a la hora de pronunciar las primeras palabras, dar los primeros pasos, etc., etc., etc. Más diré en alguna medida, gozar de otros puntos de vista, y en alguna medida con otra forma de vida. Por poner un ejemplo: en vez de pasar los días en la cantina manoseando naipes y bebiendo vino, jugando con los nietos. Por supuesto ser abuelo hoy también cuenta el cambiazo que han dado las costumbres; Si a mi madre le insinuamos que actuase de canguro cambiando pañales, comprar y guisar o pasear a los críos hubiera rodado por el suelo de risa.

Como está en razón a mis nietos les he dado todo lo que ha estado en mi mano, por ejemplo, concederles tiempo para la alegría, para las vivencias y recuerdos que quedasen impresos en sus mentes; pero tan privilegiadas eran las relaciones que les doy muchas y grandes gracias porque ellos me han dado infinitamente más.