LECCIONES DE METAFÍSICA
Valladolid
8-8-2001
Queridos
hijos: He seguido unas lecciones de Metafísica y os cuento lo que me han
contado:
No
nacemos, nos nacen, y por si esto no supusiese un problema morrocotudo, la vida
que nos dan tiene los minutos contados y aún esto, con ser tanto, no lo es
todo, porque nos la dan vacía de polvo y paja y, queramos o no,
impepinablemente tenemos que ir llenándola minuto a minuto de la mejor manera
que nos sea posible.
Estoy
viendo vivir a una palomas que tengo ante mis ojos y en este terreno lo tienen
todo resuelto, no tienen que ocuparse de llenar su vida, los instintos se lo
dan todo hecho, sin ocuparse del tema siempre están haciendo lo que tienen que
hacer. Los hombres también somos animalitos, pero perdido el instinto que
planea nuestra conducta, y al encontrarnos viviendo una vida vacía tenemos que
inventarnos como llenarla, pero he aquí un problema: si fuéramos eternos nos
importaría un rábano vivirla como fuese, al tuntún, pero como queda dicho,
tenemos los minutos contados y hay que elegir muy bien nuestro plan de vida,
inventar lo mejor posible nuestra existencia, importa mucho que sea de manera
sugestiva y apetecible.
Pero,
nunca falta un pero, la mayor parte de nuestro vivir está lleno de ocupaciones
y circunstancias que nos llevan a
hacer cosas que por gusto no haríamos si no nos las impusiese la necesidad,
puesto que nos alejan de la felicidad y todos los hombres nos sentimos llamados
a serlo y la felicidad es la vida
dedicada a hacer cosas para las que tenemos singular vocación, y metidos en
ellas lo tenemos todo, no echamos de menos nada y la vida es delicia y felicidad. Pero,
desdichadamente, no todo lo que hacemos nos llevan a la dicha, hay ocasiones,
causas, motivos que no son acciones venturosas, y aquí cabe preguntar, ¿por qué
cuando somos libres de hacer lo que nos da la gana no nos ocupamos de ser felices? Será,
supongo, porque la vida es una maraña de problemas sin resolver que hay que
solucionar mientras vamos viviendo.
O
sea, Vamos a ver, resumiendo que no me quiero liar: nos arrojan a nuestra vida
y como no está hecha, la tenemos que fabricar por nuestra cuenta y riesgo. Es
decir, que la vida es nuestro ser, somos lo que ella es y nada más, pero esto
que somos no está, como en el caso de las palomas, predeterminado de antemano,
sino que nosotros decidimos, tenemos que decidir lo que vamos a ser, por
ejemplo, hoy mismo: ¿armar camorra por la pendejada más gilipollas o buscar paz
y concordia y a ser felices?
La
elección no es dudosa, pero no pocas veces elegimos lo peor. Pues eso, que
somos de lo que no hay.
Paternales
besos y abrazos
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