Historias de toda una vida

Cartas que agrada recibir

lunes, 17 de marzo de 2014

NO ES MI PROPÓSITO SER RIMBOMBANTE



NO ES MI PROPÓSITO SER RIMBOMBANTE

Valladolid 5 de Enero de 2002

Querido tío: Hablas de postrimerías de la vida y, realmente, todos vivimos de tal a tal fecha y tú con tus días y yo con los míos, los dos estamos viviendo como de propina, pero aun así es de desear que nuestra fecha de caducidad esté todavía lejana.
En tu amable tarjeta de felicitación navideña, asistiéndote toda la razón del mundo dices que la mía resultaba rebuscada y grandilocuente, y añadías  que como la virtud de la sencillez nada.
Correcto, pero quiero decirte que no era mi propósito ser rimbombante, sino, simplemente, tratándose de fecha tan especial se presta para ponerle a la cosa un poco de fantasía con el cordial propósito, de ser posible, proporcionar un mínimo de emoción y alegría. A la par olvidar, no tomar en cuenta que si escudriñamos a nuestro alrededor vemos que estamos inmersos en un consumismo aberrante y alcanzando unos niveles mínimos de sentido del humor, así que merece la pena echarle un poco de este escaso humor al tema por si logro hacer al menos sonreír, por aquello de que en este mundo si alguien logra arrancar una sonrisa a otro merece un pedacito de cielo.
Querido tío, aunque te siga pareciendo ampuloso, de corazón te deseo que hoy y siempre te sientas apasionantemente bien y delirantemente feliz.
Abrazos

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Se tan educado en tus comentarios como quieres que lo sean contigo